|
El desarrollo sostenible es un camino largo por recorrer y ciertamente
no es posible lograrlo en el corto plazo. Sin embargo, desde ya es necesario
iniciar procesos que implican decisiones políticas importantes.
1. Políticas económicas prioritarias:
· Precios adecuados para los recursos,
pues muchos están subvaluados y se desperdician, generando desechos
innecesarios. En los países en desarrollo esto sucede con recursos
como los forestales, el agua, la fauna, y el suelo, especialmente. El
uso de estos recursos implica darles un valor para fomentar su conservación
y evitar su desperdicio.
· Acceso a los recursos, especialmente
a la propiedad de la tierra y el reconocimiento de los derechos tradicionales
o ancestrales de los pueblos indígenas. El marco legal debe garantizar
un total respeto a la propiedad y el uso racional de los recursos.
· Fomentar, favorecer y premiar
a las empresas y ciudadanos que manejan los recursos naturales y hacen
un uso racional de los mismos, sin impactos negativos en el ambiente.
2. Políticas sociales prioritarias:
· Priorizar a los sectores más
pobres, garantizando el acceso a los servicios sociales (salud, educación,
vivienda, seguridad, etc.) y económicos. Esto incluye a los grupos
humanos minoritarios y a los pueblos indígenas.
· Priorizar las zonas rurales para
controlar la emigración hacia las ciudades y el deterioro de los
recursos.
· Concentrar inversiones en el
desarrollo humano, o sea, en la educación, la salud, los servicios
sociales, la seguridad, la democracia y la calidad de vida.
· Estabilizar la población,
tanto en su crecimiento acelerado como en su distribución en el
territorio.
3. Políticas ambientales prioritarias:
· Control de la contaminación
ambiental, especialmente del agua, del aire y de los ambientes humanos.
En este sentido, es de alta prioridad la disposición adecuada y
el tratamiento de las basuras y de las aguas servidas.
· Mantenimiento de la agricultura,
con extrema prioridad en evitar la degradación de los suelos productivos,
a fin de garantizar el abastecimiento de alimentos para una población
creciente.
· Conservación del patrimonio
natural del país (biodiversidad de ecosistemas, especies y recursos
genéticos).
4. Políticas de ciencia y tecnología:
· Rescate, fomento, desarrollo
y difusión de sistemas y prácticas sustentables de uso de
recursos naturales (suelos, aguas, pesquerías, bosques, etc.),
y de control de la contaminación.
· Cooperación tecnológica
y transferencia de tecnologías limpias a los usuarios rurales y
urbanos.
· El sistema educativo debe ser
reorientado hacia una educación para la sustentabilidad. Se debe
entender que la educación es la mejor forma de integrar a las poblaciones
marginales y pobres. |
|